Ansiedad que no se nota: cuando por fuera funcionas, pero por dentro estás agotado

 

✨ Cuando todos creen que estás bien… pero tú sabes que no ✨

Hay un tipo de ansiedad silenciosa que casi nadie nota.Eres responsable, trabajas, cuidas a tu familia, cumples en todo… y aun así cada noche terminas extenuado emocionalmente. Por fuera funcionas, por dentro estás haciendo un esfuerzo que pocos ven.

No es pereza.No es “ser dramático”.Es cansancio emocional acumulado.

La mente ansiosa se vuelve una máquina de alerta permanente:

• Piensa en lo que salió mal.

• Anticipa lo que podría salir mal mañana.

• Ensaya conversaciones y problemas antes de que ocurran.

• Imagina escenarios que nunca pasan, pero que igual desgastan.

Y mientras todos te dicen:

“Qué bueno verte tan bien, eres tan fuerte”tú sabes que la verdad es otra: estás agotado tratando de sostenerte.

¿Cómo se siente esta ansiedad silenciosa?

• Duermes, pero no descansas.

• Sientes tensión en cuello, mandíbula o pecho.

  

• Te cuesta decir “no”, aunque estés al límite.

• La mente no se apaga aunque el cuerpo esté destruido.

• Te emocionas fácilmente, pero no te permites llorar.

Esta ansiedad duele porque no tiene permiso para existir.Y el cuerpo empieza a pagar la cuenta.

¿Tiene salida?

Sí.Cuando empiezas a hablar de lo que sientes, algo cambia.Cuando dejas de sostener el peso solo, el cansancio emocional empieza a bajar.

La terapia no solo es para quienes “están mal”.También es para quienes se cansaron de fingir que están bien.

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